6.9.07

La portavoz de Compromís pregunta a EU qué ha hecho con 88.000 euros de las Corts

Los críticos acusan a la dirección de «nefasta gestión de recursos» y de repartirlos entre sus afines

Francesc Arabí, Valencia Los diputados y dirigentes de los sectores enfrentados en el seno del grupo parlamentario Compromís pel País Valencià y de Esquerra Unida se sientan cada día en torno a menos mesas y a base de ahorrar en diálogo se ha ido revalorizando la crispación. El comité que dirige la coalición se ha reunido una sola vez desde las elecciones y en dos de los principales órganos de dirección de Esquerra Unida (la comisión permanente y el consell polític) sólo participan los afines a la mayoría que lidera Glòria Marcos porque los sectores críticos o no se les admitió entrar en su día (el Projecte Obert encabezado por Joan Ribó y Josep Bort) o se ausentaron en señal de protesta por lo que entienden que es una laminación de las minorías.
La permanente de EU, sin presencia de los críticos, decidió no permitir a los cargos públicos acusados de «morosos» con el partido participar en la asamblea de noviembre si no pagan las deudas antes del 15 de septiembre. Se da la circunstancia de que las dos diputadas de Esquerra i País, la portavoz del grupo, Mònica Oltra, y Mireia Mollà, están prácticamente con un pie fuera de EU porque la propuesta de sanción que se eleva desde la dirección al consell nacional contempla expulsarlas por haber impulsado -a medias con el Bloc- la defenestración de Marcos como síndica. Ayer, Oltra dijo no entender cómo se les quiere echar del partido, lo cual implica ya no poder participar en la asamblea, y al mismo tiempo estén pensando en inhabilitarlas para poder participar en ese cónclave interno. Tanto la portavoz como Mireia Mollà creen que la notificación de su expulsión «no es válida» porque no está firmada por ninguno de los instructores del expediente y la recibieron el 28 de agosto, de manos de Ricardo Sixto (responsable de organización), cuando está fechada a 1 de septiembre. Por ello piensan recurrir la decisión.
A propósito de la economía de Esquerra Unida, la portavoz preguntó a la dirección qué ha hecho con los 88.000 euros que ha recibido, según los críticos, de subvenciones de las Corts en estos meses en los que el dinero ha ido directamente a parar a una cuenta de EU, como era tradición.
Preguntada sobre su deuda de 2.431 euros a EU por no haber ingresado las cuotas como cargo público del partido, Oltra explicó que no se puede determinar la cantidad porque fue imposible pactar con el responsable de finanzas qué salario le corresponde percibir. Al contrario que en el PSPV, en EU la aportación de los cargos públicos no es una cantidad igual para todos sino que depende de lo que se pacte en función del sueldo que cada uno tuviera en su actividad privada, con un mínimo y un máximo establecido. Los 2.431 euros resultarían, según Mònica Oltra, de aplicarle a ella el sueldo mínimo previsto y reclamarle todo el resto para el partido. Esquerra i País indicó en un comunicado que las acusaciones de morosidad pretenden esconder la «nefasta gestión de los recursos económicos» que están haciendo, debido a una «política de ayudas a determinados sectores de la organización con criterios de afinidad» .
La fractura interna en EU no sólo se alimenta sólo de discrepancias económicas. Se aprecia hasta en síntomas casi anecdóticos pero que dan la talla del grado de crispación existente. Por ejemplo, la desaparición de las fotografías y reseñas de los diputados y candidatos del Bloc y de Esquerra i País (Enric Morera, Josep María Pañella, Mònica Oltra y Mireia Mollà) de la web de Compromís. La página se administra desde EU de Alicante por una empresa vinculada a afiliados afines a la dirección, según fuentes críticas.

Font: Levante-EMV