21.6.06

Dirigentes de EU quieren pactar con el Bloc en Valencia para defenderse del «voto útil» al PSPV

EU y Bloc escenifican que el uno de Castelló es irrenunciable como baza negociadora

F. Arabí, Valencia

Tanto el líder del Bloc, Enric Morera, como la secretaria de organización, Pepa Chesa, y el responsable de política municipal, Damià Oliver, fueron tajantes, el día en que presentaron el principio de acuerdo con EU, al afirmar que la decisión de ir de la mano en las autonómicas no ha de condicionar la estrategia municipal. «Son dos planos distintos», subrayó Chesa, antes de advertir que cada localidad es un mundo y la asamblea local es soberana para decidir. La fórmula elegida por el Bloc es la única posible para evitar que su mapa de implantación comarcal se convierta en un sembrado de rebeliones contra la ejecutiva nacional. En Esquerra Unida, su coordinadora general, Glòria Marcos, sentenció en el consell nacional del sábado que nada de asumir compromisos de pactos municipales. Esto es, que también se delega la responsabilidad en las agrupaciones locales para evitar problemas.



Con todo, dirigentes de las ejecutivas nacionales de ambos partidos coincide en advertir que Valencia merece un tratamiento excepcional y sería conveniente reproducir el acuerdo por un doble motivo: en parte porque al ser la capital de la Comunitat es un escaparate idóneo para proyectar al electorado que la convergencia programática EU-Bloc es creíble, pero sobre todo, porque a ambos partidos le salen mejor las cuentas, especialmente al Bloc.

El anuncio de que la candidata del PSPV será Carmen Alborch y, sobre todo, la certeza de que su partido y el propio presidente Zapatero se volcarán en la campaña ha alertado a dirigentes de EU (especialmente de Esquerra i País y de sectores del PCPV) y les ha dado nuevos argumentos para defender la conveniencia de ir juntos.En la capital, EU tiene dos concejales, gracias a los 31.619 votos que logró en 2003. El Bloc apenas sacó 11.201 sufragios en esas elecciones, por lo que sus opciones de lograr acta de concejal yendo en solitario son prácticamente nulas. De ahí el interés de los nacionalistas en el acuerdo. Los partidarios del pacto en EU entienden que una bolsa de votos como la del Bloc afianzaría el segundo edil y daría opciones a lograr un tercer concejal, dependiendo de la participación. Sin embargo, un dirigente del PCPV veía ayer «muy difícil» que el pacto se reproduzca en Valencia.

Por otro lado, las direcciones de EU y Bloc han proclamado que la cabecera de lista por Castelló es irrenunciable. Un pulso que se antoja más un recurso negociador que otra cosa. Fuentes de EU admiten que a fin de cuentas, en Castelló se sacarán dos diputados, por lo que al final podrían renunciar a la cabecera y hacer valer en las listas de Valencia y Alicante esa concesión en la negociación. A la dirección del Bloc, por su parte, podría salirle contraproducente ese primer lugar, puesto que podría recaer en Enric Nomdedeu o Antoni Porcar, dirigentes que no sintonizan con Morera. El primero fue, de hecho, el único de 21 que votó contra el pacto en la ejecutiva.

La ejecutiva de Enric Morera se está empleando a fondo, por lo demás, para lograr que el consell nacional del 1 de julio ratifique el pacto con el Bloc con una mayoría lo más amplia posible. Fuentes nacionalistas ven casi imposible alcanzar el 91,5% logrado en el consell nacional de EU y señalan que sería un buen espaldarazo al pacto que cosechara un 80% de apoyo.

Font: Levante-EMV