28.11.06

EU y Bloc negocian contrarreloj y con recelo

Intentarán hoy pactar un decálogo programático tras fracasar ayer una reunión de casi cuatro horas

Francesc Arabí, Valencia

Esquerra Unida y Bloc aspiran a sintonizar sus programas electorales, acompasarlos a la misma longitud de onda que el del PSPV y ocupar después parcelas de poder en el Consell, en caso de que un hipotético gobierno tridimensional sea posible tras las elecciones del 27 de mayo de 2007. En la tarde y noche de ayer, delegaciones de ambos partidos evidenciaron su capacidad negociadora y lograron suscribir, tras casi cuatro horas de conversaciones, un comunicado conjunto de 67 palabras y un puñado de puntos y comas estratégicamente esparcidos.


Una sabrosa nota de prensa en la que solemnemente los dos partidos anunciaban al mundo: «Las comisiones negociadoras del Bloc y Esquerra Unida, reunidas esta tarde hasta las 20,30 horas, han decidido continuar la reunión mañana martes por la mañana. Trabajan sobre documentos programáticos, protocolos de funcionamiento de la posible coalición y otros aspectos que aún hay que perfilar». La nota pactada finalizaba con una referencia al reparto de escaños en un futuro grupo parlamentario: «Por lo que respecta a las listas electorales, el debate continúa abierto y no se ha llegado a ninguna conclusión».

En tu casa y en la mía

El encuentro de ayer fue en la sede de EU porque siete días antes se habían reunido en la casa del Bloc. Es tanta la desconfianza mutua entre estos aspirantes a socios que las direcciones de los dos partidos miden en micras cada gesto y cada paso para no soliviantar los ánimos de determinados sectores de la militancia reacios al acuerdo. Ahí radica buena parte de la dificultad para cerrar la coalición, pese a que en los dos partidos son conscientes de que el tiempo se les escapa. De hecho, EU quiere llevar la propuesta de pacto al consell nacional del sábado para poder convocar el referéndum en el que la militancia ha de ratificar la propuesta de ir a las urnas de la mano del Bloc, como en 1987. Precisamente porque no andan sobrados de tiempo, esta mañana se reanudan las conversaciones en el punto en el que ayer se quedaron. En la tormenta de ideas para redactar mancomunadamente un manifiesto decálogo en el que se destilen los principales mandamientos del ideario del valencianismo y la izquierda del PSPV.
Una declaración programática en versión de bolsillo que se teñirá de verde. Porque hoy se incorporan a la negociación representantes de Els Verds y Els Verds-Esquerra Ecologista, del actual diputado de EU-Entesa Carles Arnal. Ambos quieren subirse al carro de esta suerte de frente popular para «desalojar al PP». La cuota reservada al diputado ecologista es el cinco por Valencia. La dirección de EU quiere que sea Joan Francesc Peris (Els Verds del País Valencià) el que ocupe la plaza de parlamentario.La negociación no avanzó ayer sustancialmente respecto de lo ya acordado el lunes pasado. El nombre de la cosa parece claro («EU-Bloc-Verds. Compromís pel País Valencià») y la portavocía de grupo para Glòria Marcos son temas cerrados. En cuestión de financiación, hay un principio de acuerdo sobre la base de que los gastos del grupo parlamentario se pagarán conjuntamente y después se aplicará una especie de régimen de gananciales por el que cada uno de los partidos recibirá la parte proporcional al número de diputados.
EU cobrará el 60%, los nacionalistas, el 30% y el 10% restante será para los ecologistas. Cálculo realizado sobre un grupo de diez parlamentarios, los que sacaría la coalición si sumara exactamente los 270.000 votos (11,3%) logrados en los comicios de 2003. Como es sabido, las subvenciones de las Corts han de estar destinadas a pagar los gastos de funcionamiento del grupo, pero la ley no permite en ningún caso que los euros salgan del número cuatro de la Plaza de San Lorenzo. La campaña electoral también será financiada proporcionalmente en función del porcentaje de cada formación en los puestos de salida en las listas.

Muchísima discreción

La ejecutiva nacionalista se reúne hoy para tratar el estado de la cuestión de un pacto que, tras casi medio año en danza, empieza a tomar tintes de pacto de la burra. La permanente de la dirección de Esquerra Unida celebra cónclave mañana miércoles. Y unos y otros intentarán seguir llevando las negociaciones con muchísima discreción, según acordaron el 20 de noviembre. Como para mantener la ficción de que el bacalao programático tiene mucho calado. Como para disfrazar que el auténtico negocio que se aborda en la mesa es el reparto de sillones ergonómicos tapizados de cuero.

«El que se levante de la mesa está muerto»

El ajuar que Esquerra Unida y Bloc aportarán al matrimonio de conveniencia se está negociando sobre la base del peso que cada partido tendrá en la coalición. Se aplica, por así decirlo, una fiscalidad progresiva. Tanto ganas, tanto pagas. En la reunión de tres horas celebrada el lunes 20 de noviembre, parece que quedó claro (al menos esa fue la lectura nacionalista) que la composición de los diez puestos de salida en las candidaturas sería 60% (EU)-30% (Bloc)-10% (ecologistas). Y ello porque parecía que tras la reelección de Glòria Marcos al frente de EU por una amplia mayoría, la nueva dirección estaba dispuesta a ceder al Bloc el tercer lugar en la lista de Alicante. Ayer, los nacionalistas interpretaban que EU quería «desandar el camino». Esquerra Unida guarda silencio y en el Bloc se esfuerzan en proclamar que la cuestión de las listas no se abordó ayer. Pero, acto seguido, admiten que en ese punto está la chicha. «El que se levante de la mesa está muerto; el Bloc no se levantará», dicen desde el partido de Morera. Más claro, agua.

Font: Levante-EMV 28/11/06

1 comentari:

Anònim ha dit...

És difícil trobar joies pamfletàries tan ridícules com les que acostuma a destilar el senyor Francesc Arabí.
Però cal reconéixer-li que anit es va superar.