La designación del número uno por Castellón amenaza con dificultar el pacto entre EU y Bloc

Marcos advierte de que su partido no renunciará a encabezar las listas en las tres provincias
La elaboración de la candidatura por Castellón amenaza con obstaculizar el pacto entre EU y Bloc para las próximas elecciones autonómicas, antes incluso de que se materialice. Mientras que los primeros rechazan ceder los cabezas de lista, los segundos argumentan su peso en la provincia para exigir el número uno.
M. GORDILLO/G. ALEMÁN/VALENCIA
La provincia de Castellón será el principal campo de batalla donde EU y Bloc pujarán por ocupar el puesto de salida, el número uno de la lista electoral. La candidatura por esta circunscripción amenaza con ponerle la zancadilla al más que probable pacto entre las dos formaciones para las próximas elecciones autonómicas.

Ocupar el primer puesto por Castellón es un objetivo irrenunciable para el Bloc. Desde sus filas argumentan que ir en la cabeza de lista tendría rentabilidad para la coalición de los partidos, ya que en pasadas elecciones obtuvieron más votos en esa provincia que EU y es así desde hace 12 años. Pero el razonamiento no vale para la formación que dirige Glòria Marcos, desde donde afirman que son ellos quienes llevan el mayor peso del pacto y tienen más entidad.

La coordinadora de EU se reafirmó ayer en este punto y señaló que su partido no va a renunciar “en ningún caso” a liderar la candidatura en las tres provincias. Según Marcos, el Consell Nacional de la formación ya ratificó ese punto de partida el pasado sábado.

Resultados sobre la mesa
En cualquier caso, aún parece pronto para hablar de ello, dado que por parte del Bloc aún queda el trámite del Consell Nacional, que el próximo día 1 de julio deberá autorizar el inicio de las negociaciones.

En este sentido, la secretaria de Organización del partido, Pepa Chesa, pidió ayer “prudencia” a los responsables de EU para no “poner en riesgo” el acuerdo electoral. Eso sí, las condiciones del pacto deberán quedar bastante perfiladas antes de que acabe el próximo mes, y para ello cada partido sacará sus propias cartas. Aunque desde el Bloc se insiste en que no es positivo discutirlo antes de hora, los nacionalistas saben que Castellón es su punto fuerte y no pueden renunciar a esta provincia.

Para la elaboración de las listas habrá que poner los resultados electorales de 2003 encima de la mesa como punto de partida. Aunque en el proceso de negociación cada parte tendrá que renunciar a ciertas cosas, la dirigente del Bloc señaló que habrá que tener en cuenta unas premisas básicas.

Font: Las Provincias 20/06/06